Una campaña irrepetible: Osasuna vuelve a la máxima categoría
Osasuna volverá a jugar en Primera división tres temporadas después de su efímera última experiencia en la máxima categoría del fútbol español. La decepción de la no clasificación para los 'playoffs' de ascenso de la campaña pasada se tornó en ilusión en la presente. Un año prácticamente inmaculado, memorable y difícilmente repetible rematado este lunes gracias a la victoria del Granada en Albacete.
Y eso que el inicio no fue bueno, pues Osasuna tardó cuatro jornadas en lograr su primera victoria, única en sus primeros cinco partidos del campeonato. Al contrario que el año pasado, donde los rojillos fueron máximos aspirantes al ascenso al acabar de bajar a Segunda, los navarros no partían como favoritos.
No en vano, Osasuna permanece invicto en El Sadar hasta la fecha: 17 victorias y dos empates es el fantástico balance cosechado ante su público. 15 de los triunfos han sido seguidos, enlazando la mejor racha de su historia como local. Algo al alcance de muy pocos. Unas cifras que puede seguir ampliando a falta de dos partidos como local frente a Las Palmas y Oviedo. Además, El Sadar ha registrado siete 'llenos' consecutivos en las últimas fechas.
Osasuna ha ido 'in crescendo' a lo largo de la temporada. Tras un inicio algo dubitativo, con una victoria en cinco partidos antes mencionada, la fuerza de El Sadar y la mejoría de resultados a domicilio colocó a los navarros en la parte alta de la clasificación. El primer triunfo a domicilio tardó siete partidos. No fue hasta la jornada 13 cuando Osasuna lo logró en Extremadura. Y lo hizo gracias a una de sus innumerables remontadas.
Y es que como la campaña, los rojillos acaban los encuentros en un gran estado de forma. Así ha logrado muchos triunfos en partidos en los que ha comenzado por detrás en el marcador.
Osasuna acabó la primera vuelta siendo el sexto en puntuación tras sumar 35 puntos en 21 partidos con seis derrotas y cinco empates. A falta de cinco jornadas para finalizar la segunda, los rojillos suman 36 con una sola derrota y tres igualadas.
Los fichajes han aportado mucho en la presente campaña. A pesar de que hubo muchos equipos que se reforzaron más que los rojillos. Osasuna reforzó todas sus líneas: desde la portería hasta la delantera. Y todos ellos han contribuido a la sensacional campaña.
Pero los jugadores de la casa también han tenido mucho que decir. Nombres como Oier y Torres han brillado sobremanera. El primero cambió de posición: pasó de defensa a pivote. Algo que le pasó factura en las primeras jornadas pero que ha sido una de las principales fortalezas durante la campaña. El segundo recuperó su mejor versión. Y partiendo desde la banda. Es el pichichi del conjunto navarro y se nota que cuando Torres carbura, el equipo va como un tiro. No en vano, la defensa ha sido una de las claves.
Osasuna es el cuarto equipo que menos goles ha recibido y el más goleador del campeonato, teniendo la segunda mejor diferencia de tantos de la toda la categoría. Los navarros apenas han encajado siete goles en los 18 partidos que lleva disputados en El Sadar y en 15 partidos ha acabado imbatido.
Osasuna tiene tiempo suficiente para planificar la próxima temporada. Algo que ya llevan haciendo en el club vista la trayectoria del equipo que les llevaba inexorablemente a Primera división.